Hay mucho que decir cuando se trata de vigilar a los niños, sobre todo si son pequeños y no saben cómo defenderse. Ellos son vulnerables a peligros que solo los padres, representantes o aquellos que tienen el conocimiento sobre sus cuidados pueden ayudar a prevenir.
Cuando el niño es muy pequeño, aún considerado un bebé, la preocupación es aún mayor, y saber si está pasando por un problema se puede considerar una tarea difícil, llegando incluso a ser detectado por los padres después de mucho tiempo. Así como sucedió con Katerina Getsevich, la joven madre de Accurisa, que solo tiene un año y medio.
Todo comenzó cuando Katerina olió algo desagradable que provenía de la boca de su hija, lo que preocupó mucho a la mujer. Al principio pensó que podía ser mal aliento y que al cepillarla mejor sería suficiente para combatirlo. Pero ni siquiera un baño logró eliminar el mal olor que salía de la boca de la niña, dejando a su madre en alerta.
Pasaron semanas antes de que la mujer decidiera buscar ayuda médica, sin saber qué más hacer después de que el olor aumentara de intensidad. Sin respuestas sobre lo que estaba pasando, la joven llevó a su hija al doctor, temiendo que fuera algo grave.
La niña llegó a presentar algunos síntomas, que inicialmente fueron ignorados por su madre e incluso por el médico que atendió a la niña en una primera consulta, como lo era un moqueo verdoso y algo de malestar, por lo que pensaron que solo era un resfriado.
El médico incluso le recetó un antibiótico para curarla, pero después de que nada funcionó, su madre buscó ayuda médica nuevamente.
Sin embargo, la niña no se quejaba de ningún dolor, lo que hizo que la madre se sintiera más intrigada. Fue entonces cuando un exhaustivo examen en el hospital, le revelara que la pequeña tenía una esponja en su nariz. La cual, además de dificultar la respiración, estaba en mal estado y quedó completamente atrapada en el orificio nasal de la pequeña, imposibilitando su extracción.
Rápidamente, el doctor procedió a retirar la esponja sin causarle más lesiones a la pequeña, quien pronto se recuperó de todo el trauma.